El presidente de Rusia, Vladimir Putin, habló sobre la crisis política que padece Bolivia tras la renuncia de Evo Morales y por eso dijo que el país vecino “está al borde del caos”. “No hay poder en Bolivia. Me recuerda a Libia. No hay una intervención directa desde fuera, pero el país está al borde de un caos“, analizó el mandatario
“Confiamos en que, sea quien sea el que llegue al poder en Bolivia, se mantenga el interés por desarrollar las relaciones con Rusia. Por nuestra parte, estamos dispuestos a cooperar con las autoridades que recibirán un mandato legítimo del pueblo de este país”, manifestó el mandatario en Brasilia, durante un encuentro de los países BRICS.
Por su parte, el vicecanciller ruso, Serguéi Riabkov, dijo horas antes tras que Moscú haya reconocido al senadora Jeanine Áñez como presidenta interina boliviana. “Está claro que será a ella a quien verán como presidenta interina de Bolivia hasta que el problema de la elección del nuevo presidente sea resuelto por los comicios”, afirmó.
“Nos dimos cuenta de que, cuando fue nombrada para este cargo, no había quórum pleno en el Parlamento, por lo que vemos aquí algunos puntos que, por supuesto, tenemos en cuenta. Percibimos todo lo que precedió al cambio de poder como acciones que en realidad equivalen a un golpe de Estado. Esto nos recuerda una vez más que ciertas fuerzas utilizan métodos que van más allá de las normas legales para resolver sus propios problemas políticos”, agregó.
Áñez asumió la Presidencia interina del Estado Plurinacional en una sucesión sin acuerdo parlamentario, aunque fue respaldado por el Tribunal Constitucional. El organismo abrió además la puerta a unas elecciones dentro de poco tiempo. Mientras que desde su exilio en México, Evo catalogó su autoproclamación como un “golpe artero y nefasto”.
